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		EDITORIAL
		Envejecer saludablemente Concepció Cabanes Durán Diplomada en Enfermería, Licenciada en Humanidades. Universidad Autónoma de Barcelona, España Tesela [Rev Tesela] 2015; 17
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Cabanes Durán, Concepció. Envejecer saludablemente. Tesela [Rev Tesela] 2015; 17. Disponible en <https://www.index-f.com/tesela/ts17/ts1700.php> Consultado el

    Según el estudio Europeo sobre "Sanidad y Calidad de Vida" de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) del 2012, el estado español tiene una mediana de edad de 82,5 años, lo que significa que se ha convertido en el país que tiene la esperanza de vida más alta de la Unión Europea que es de 79,2 años de edad.¹

El estado de salud de una población es uno de los principales indicadores de su grado de desarrollo social, del nivel de bienestar de sus ciudadanos y, también en parte, de su potencial de progreso y proyección hacia el futuro.

Tanto la mortalidad como la esperanza de vida y la percepción de salud han evolucionado favorablemente en los últimos años. A pesar de ello hay muchas personas adultas que padecen enfermedades crónicas que, en muchos casos, comportan diversos niveles de discapacidad y un cierto grado de dependencia. Siendo hoy en día la cronicidad una de las grandes preocupaciones en la mayoría de los países desarrollados, por eso la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya en el año 2005 aconsejaba cambiar las políticas de salud para afrontar los retos de los años próximos.

Uno de los retos de lapoblación es envejecer con salud y evitar o alargar el proceso de dependencia, una parte importante de laresponsabilidad en este aspecto recae sobre nosotros mismos, ya que modificando alguna conducta o hábito del día a día, favorecemos un envejecimiento más activo y saludable.

Entre otros, el Canal Salut del Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya y la Fundació Salut i Envelliment-UAB,² aconsejan mantener una dieta sana y equilibrada. Es importante realizar todas las comidas cuatro o cinco al día y alimentarse equilibradamente mezclando todos los grupos de alimentos siempre que sea posible. Con la edad la sensación de sed disminuye, así pues hay que beber agua a pesar de no tener sed. El agua es imprescindible para la vida. Beber agua posibilita una buena hidratación corporal ypermite que todos los procesos de nuestro organismo funcionen adecuadamente.

También que, antes de realizar ejercicios físicos, hace falta motivarse y encontrar una actividad que sea de nuestro interés.³ La Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda 150 minutos de ejercicio moderado a la semana.⁴

Realizar ejercicio físico tiene grandes beneficios: previene enfermedades, mejora el estado de ánimo, reduce la pérdida de capacidades tanto físicas cómo mentales y si es en grupo fomenta además las relaciones sociales. Tonificar y fortalecer los músculos, mantener la movilidad de las articulaciones para facilitar las tareas habituales y reducir las probabilidades de caer son otros de los beneficios de realizar actividades físicas.³

Conviene ser constantes y activos diariamente, pero vigilando el esfuerzo para no llegar al agotamiento.

Es bueno entrenar la mente, la actividad intelectual y el ocio,permite ejercitar la mente, nos ayuda a mantener nuestra memoria y otras funciones cognitivas conforme nos hacemos mayores. Participar en las actividades cotidianas y de la comunidad, también son maneras de entrenar la mente. Utilizar y hacer ejercicios con las nuevas tecnologías en talleres o de forma individual.³

Tener hábitos y un estilo de vida saludable, ayuda sin duda a envejecer mejor.

El participar en programas preventivos e identificar los propios malestares puede prevenir la aparición de algunas enfermedades.³ Hay que seguir las indicaciones del medico y/o de la enfermera y no hacer un uso abusivo de los medicamentos. Ante nuevas situaciones de salud, una buena predisposición a los cambios ayuda a adaptarse y vivir mejor.

Mantener relaciones sociales supone una fuente de apoyo a muchos niveles: intercambiamos información y opiniones, nos ayudamos cuando hace falta y nos apoyamos emocionalmente.3 La soledad es un factor importante de sufrimiento psicológico. Un reciente estudio publicado en la revista "Journal of Neurology, Neurosurgery and Psychiatry" señala que, además, puede afectar de forma negativa a las funciones cognitivas de los mayores. En este artículo se describe cómo las personas de la tercera edad que no tienen apoyos sociales y se sienten solas muestran un riesgo mayor de sufrir deterioro cognitivo.

Seguir tomando decisiones es fundamental, tenemos que tener oportunidades para expresar libremente nuestras opiniones y deseos y poder decidir como queremos vivir nuestro día a día. Eso sí teniendo en cuenta también que no estamos solos y aislados, sino vinculados a otras personas. Y es que todas las personas, en mayor o menor medida, dependemos las unas de las otras.³ Las personas mayores tienen los mismos derechos que cualquier otro, incluso cuando existe algún tipo de dependencia, por lo tanto, es importante continuar tomando las decisiones que afectan nuestro día a día.

Los entornos seguros ayudan a envejecer mejor evitando riesgos y previniendo la dependencia.

Hay que prestar atención a la seguridad principalmente en el hogar para no sufrir caídas o accidentes domésticos previsibles. Fuera del domicilio es importante prestar atención a las condiciones tanto climatológicas como las del entorno propiamente (coches, aceras, semáforos...). Conocer las personas que viven cerca y tener personas de confianza, favorece la creación de un entorno más seguro.³

Todos estos aspectos entre otros, ayudan a envejecer mejor, con más salud y calidad de vida.
 

Bibliografía

1. Sanidad y Calidad de Vida.Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) del 2012. disponible en: https://www.oecd.org/spain [Consultado el 7 de diciembre de 2014].

2. Canal Calut. Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya. Disponible en: https://canalsalut.gencat.cat/ca/home_ciutadania/vida_saludable/ [Consultado el 10 de diciembre de 2014].

3. EnvellimentSaludable. Fundació Salut i Envelliment. Universitat Autònoma de Barcelona. Disponible en: https://www.envellimentsaludable.com/?lang=es [Consultado el 8 de diciembre de 2014].

4. OMS. Recomendaciones mundiales sobre actividad física para la salud. Suiza. 2010. Disponible en: https://www.who.int/dietphysicalactivity/factsheet_recommendations/es/ [consultado el 5 de diciembre de 2014].