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		¡Acabad ya con esta crisis! Paul Krugman Crítica, 2012. 272 Págs. Autor comentario: Raquel Rodríguez Llanos (Coordinadora Enfermería Atención Sociosanitaria Servicio Extremeño de Salud. Vocal ANDE Extremadura) Tesela [Rev Tesela] 2012; 12
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Rodríguez Llanos, Raquel. ¡Acabad ya con esta crisis!, de Paul Krugman [comentario de texto]. Tesela [Rev Tesela] 2012; 12. Disponible en <https://www.index-f.com/tesela/ts12/ts1200.php> Consultado el

    Paul Krugman, nacido en Albany en 1953, es economista, periodista y divulgador norteamericano, cercano a los planteamientos neokeynesianos. Está considerado el economista más destacado de su generación, y en 2008 fue galardonado con el premio Nobel de Economía.

Paul Krugman, ha escrito un libro realmente extraordinario, en donde, las causas de la actual crisis económica, los motivos que conducen a que sigamos sufriendo hoy sus consecuencias y la forma de salir de ella - recuperando los puestos de trabajo y los derechos sociales amenazados por los recortes - se explican con una claridad y sencillez que cualquiera puede, y debería, entender.

"Naciones ricas en recursos, talento y conocimientos -los ingredientes necesarios para alcanzar la prosperidad y un nivel de vida decente para todos- se encuentran en un estado de intenso sufrimiento". ¿Cómo llegamos a esta situación? Y, sobre todo ¿cómo podemos salir de ella? Krugman plantea estas cuestiones con su habitual lucidez y nos ofrece la evidencia de que una pronta recuperación es posible, si nuestros dirigentes tienen "la claridad intelectual y la voluntad política" de acabar ya con esta crisis.

El libro es un alegato en defensa de las tesis económicas de Keynes y un latigazo a políticos y economistas neoliberales a quienes culpa de la recesión y el estancamiento económico. Krugman nos dice: "La crisis que estamos atravesando es fundamentalmente gratuita: no hace falta que suframos tanto ni destruir la vida de tanta gente". Su lectura aporta una visión, capaz de cambiar la percepción de la vida actual y comprender como la economía es una ciencia sometida a la subjetividad humana.

En toda la obra, el grito de Krugman, pretende trasmitirnos que vivimos en un engaño. Y, a través, de trece interesantes y amenos capítulos, hace un repaso histórico del pensamiento económico, que está dominando el estado político y académico en la actual crisis, tanto de Estados Unidos como de Europa.

Los primeros capítulos describen la misma crisis, y apunta hacia la anterior revolución ultraliberal de los años ochenta, para justificar males de hoy, como la brutal desigualdad que ha disparado las diferencias entre los más ricos y las clases medias, además de la desregulaciones bancarias, fundamentalmente por la escandalosa reducción de los tipos impositivos máximos. Y esa desigualdad, es para Krugman, una causa más de la actual depresión, porque el dinero compra influencia y las políticas neoliberales, aunque han hundido nuestras economías, han resultado muy beneficiosas para las élites económicas, que crearon un clima político, en el que era imposible, percibir las señales de alarma y actuar en respuesta a ellas. En los siguientes capítulos y hasta el final, Krugman mantiene abiertamente que los dirigentes actuales y sus asesores, así como muchos personajes del mundo económico, no han aprendido de las crisis precedentes.

Impresionante el capítulo que se centra en los "Austeríacos", (traducción de austerians) - una peligrosa mezcla de austeridad y fanatismo en el seguimiento de la escuela austriaca económica- y su deseo obstinado y profundamente destructivo, de dar un tijeretazo al gasto gubernamental y reducir los déficits, para restaurar la confianza, aun en el contexto de una economía deprimida, que lleva a la par "convertir la crisis económica en una obra moral, un cuento en el que la depresión es una consecuencia necesaria de los pecados precedentes, que no se debe aliviar".

Krugman respecto a la implementación de políticas de contención del gasto público es tajante: "La estrategia de austeridad no funciona. Con elevadísimos niveles de desempleo, la lógica de la austeridad, ha demostrado su ineficacia. Así que necesitamos desesperadamente poner en marcha estrategias que fomenten la creación de puestos de trabajo y crecimiento; no una estrategia que ya ha demostrado su fracaso". Con razón argumenta, que recortar el gasto público, empeorará la depresión económica en la que estamos hundiéndonos. Y sostiene por tanto, que los recortes no hacen más que profundizar los problemas de naciones como Grecia, Portugal y España. También defiende que, a falta de inversión privada, deben ser los gobiernos los que adopten políticas expansivas y de creación de empleo.

El autor, se rebela contra mensajes puramente ideológicos, que han calado en las opiniones públicas y que han sumido a nuestras sociedades, en la más absoluta apatía y resignación, mientras ven perderse avances, que han costado décadas lograr. Krugman, por tanto, intenta romper con el predominio de este saber convencional tan destructivo y apela en cambio a una opinión pública informada, que nos lleve a hacer lo correcto.

En general, el texto es un apasionante punto de vista, una respuesta alternativa, a la actual situación que se vive, cual han sido los motivos y hacía donde nos conducen. Un libro recomendable, pedagógico, y empático con el coste que a nivel social, está teniendo la actual crisis económica, debido a los altos niveles de desempleo y las grandes dificultades de reinserción laboral de los parados de larga duración, a quienes Paul Krugman dedica la obra: "A quienes están en paro, que se merecen algo mejor".