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TEMPERAMENTVM ISSN 169-6011

 

 

EDITORIAL

 

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San Juan de Dios y su modo de aplicar cuidados

Francisco Ventosa Esquinaldo
Director del Centro de Enfermería San Juan de Dios. Adscrito a la Universidad de Sevilla, España

Correspondencia: Hospital San Juan de Dios. Centro de Enfermería. Avda. San Juan de Dios s/n, 41930 Bormujos (Sevilla), España

Temperamentvm 2011; 14

 

 

 

Cómo citar este documento

Ventosa Esquinaldo, Francisco. San Juan de Dios y su modo de aplicar cuidados. Temperamentvm 2011, 14. Disponible en <https://www.index-f.com/temperamentum/tn14/t1411.php> Consultado el

 

 

 


    Los trabajos teóricos sobre la fundamentación del pensamiento enfermero, es decir, sobre la filosofía o, más concretamente, sobre la teoría de la ciencia enfermera, han llevado a la Enfermería a un nivel profesional superior. El eje sobre el que gira la actividad enfermera ha cambiado: de centrarse en el conocimiento sobre cómo funcionar las enfermeras concentradas en el proceso enfermero a centrarse en lo que saben las enfermeras y cómo lo utilizan para guiar su pensamiento y su toma de decisiones mientras se concentran en el paciente. Estos trabajos teóricos fueron permitiendo a las enfermeras entender la necesidad de expresar a través de los Modelos Conceptuales de Enfermería las proposiciones y definiciones que especifican sus interrelaciones, para llegar a formar una perspectiva organizada con el fin de observar los fenómenos específicos de la disciplina.

En este contexto, y conociendo el legado de San Juan de Dios y sus herederos, al profundizar en el estudio de los Modelos surge la pregunta de si la referida obra Juandediana podría llegar a ser constitutiva de un Modelo de Cuidados.

"Fue tan grande el ejemplo de vida que dejó Juan de Dios y lo mucho que agradó a todos que (otros) se animaron a imitarle y seguir sus pisadas sirviendo a nuestro Señor en sus pobres y ejercitándose en el oficio de la hospitalidad por solo Dios"1

Creando un estilo de asistencia, en el que lo esencial fue la atención integral a la persona enferma y necesitada, siguiendo siempre el espíritu de San Juan de Dios. Cobra por tanto significado el análisis del pensamiento Juandediano, que inicia el ejercicio de la Enfermería en las diferentes áreas profesionales: la clínica, la docencia, la gestión y la administración.

Hay razones que pueden llevar a pensar que dicha construcción conceptual no es posible, por un lado, dada la procedencia católica de este autor y sus seguidores y, por otro, el hecho de que este pensamiento se desarrollara al margen de lo académico, que en cierto modo es lo que da "carta de naturaleza" a la práctica totalidad de las autoras reconocidas como teorizadoras actuales, razones que ignoran conocimientos históricos.2

Resulta preocupante comprobar la utilización que de su figura se ha hecho por distintos sectores ajenos pero colaterales a la enfermería, entre los que hubo un cierto consenso en reforzar la sacralización de Juan de Dios en un intento de alejar al personaje de la realidad, con lo cual difícilmente podía tomarse como referente de una disciplina en particular, como la enfermería.3

Parece sea peculiar de nuestro tiempo la radicalidad con que el medio universitario se ha planteado la realización del hombre. En el contexto de esta mentalidad generalizada, se ha querido estudiar, como la cosa más normal, la realización humana, meramente humana, de un santo (San Juan de Dios). Se ha pretendido aislar lo que se considera "hecho humano" de su realización personal, e independizarlo de algo también realizador, el hecho de su santidad. Quizás se olvida que las dos realidades, cuya separación se busca, conviven fundidas en la unidad de acción de una misma persona, el "hombre santo". Separar, aislar estas dos realidades, es una abstracción, es un acto de disección meramente intelectual, cuyo peligro inmediato es el reduccionismo abstracto.4

La modernidad ha desarrollado el racionalismo y la laización. Ha difundido la idea de que la ciencia puede sustituir a la religión y aportar soluciones técnicas a los problemas que aquejan a la humanidad. No se puede desandar lo andado. La técnica forma parte de nuestra existencia, la cuestión es saber que hacer con ella.5

Era necesario realizar un estudio sobre conceptos y valores presentes en el pensamiento de San Juan de Dios, y aquello que constituye el modelo Juandediano y su relación con el paradigma de la enfermería actual. Sabemos lo complicado que resulta resaltar y significar los valores de una sola persona, y sobre todo cuando lo hacemos en un periodo de su vida, 1537 - 1550.

Para este trabajo se ha utilizado la metodología cualitativa. Esta metodología ha posibilitado, gracias a su marcado carácter comprensivo e interpretativo el avance del conocimiento humano, no ya solo de los textos escritos, sino además del mundo simbólico y cultural que el hombre plasma en sus acciones.

La singularidad de San Juan de Dios no es algo abstracto o indefinido, él lo expresa en su manera de vivir, pensar y actuar. El proceso iniciado por él en la administración de cuidados constituye un ejemplo de sensibilidad que abarca lo sociosanitario. La enfermería propuesta por él es más que la prestación de cuidados físicos, incluye cuidados integrales, es decir cuidados físicos, mentales, psicológicos, éticos, religiosos y sociales. Asimismo la filosofía Juandediana contempla la asistencia espiritual.6

Juan de Dios es un hombre práctico. Centrado en la realidad social de su momento. Su gesto de caridad, de entrega a la causa de la humanidad doliente, gesto que podía parecer temerario, aislado e insostenible económicamente, impulsó a los espíritus más generosos a ayudarlo en las fatigas cotidianas y a compartir su pasión de caridad; él no imaginó que su gesto, su ejemplo, sería recogido y perpetuado por tantos seres generosos que gastarían su vida para mantener vivo el mismo espíritu.

La vida de Juan de Dios ilumina a todos los seguidores. Desde su infancia, las horas que marcaron los caminos de Juan de Dios fueron momentos de permanente creatividad, de cambio, de búsqueda, como si quisiera indicarnos qué hacer para percibir y distinguir la voz de Dios, cuando orienta al hombre a una misión radicalmente carismática. Toda la vida de Juan de Dios, antes y después de la llamada es un texto en el que se puede estudiar no solo la obra de Dios en él, sino también la pedagogía de la creatividad, su pensamiento y acción.


Bibliografía

1. De Castro, Francisco. Historia de la vida y sanctas obras de Juan de Dios y de la institución de su orden, y principio de su hospital. Granada: Casa de Antonio Lebrixa, 1585; f 87-88v.
2. Ventosa Esquinaldo, Francisco. Conceptos y valores presentes en el pensamiento de San Juan de Dios constitutivos del modelo Juandediano y su relación con el paradigma de la enfermería actual. Reduca. Serie Trabajos fin de Master. 2010; 2(1): 1314-1324.
3. El enfermero de Granada [editorial]. Index de Enfermería. 1995; IV(14): 7-8.
4. Sánchez Martínez, José. Kènôsis-Diakonìa en el itinerario espiritual de San Juan de Dios. Madrid: Fundación Juan Ciudad, 1995: 129.
5. Pérez, Joseph. El humanismo de Fray Luís de León. Madrid: CSIC, 1994: 18-19.
6. Fernandes de Freitas, Genival; Siles González, José. Antropología y cuidados en el enfoque de San Juan de Dios. Index de Enfermería. 2008. 17(2): 144-148.

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